Este programa educativo, que cuenta con un muñeco buzo llamado Ghosty como personaje central, tiene como objetivo crear conciencia sobre las redes fantasma y el fenómeno de la pesca fantasma entre los niños y promover el cuidado del medio ambiente. Ghosty es una muñeca suave de 28 cm de altura, hecha a mano en Portugal con algodón orgánico, creada por la fundación Healthy Seas e inspirada en los buceadores voluntarios de Ghost Diving que usan trajes secos naranjas para destacar en condiciones de baja visibilidad, mientras limpian las redes fantasma de los mares y océanos. Las redes fantasma son redes de pesca perdidas, abandonadas o desechadas que continúan atrapando y matando vida marina, lo que representa una amenaza significativa para los ecosistemas oceánicos y la salud humana.